Por Miguel Ángel Gurrola.
En el marco de la Feria Internacional del Libro, que se celebra en la ciudad de Guadalajara encontramos un tumulto de gente que comparte el gusto por la lectura.
Personas de todas las edades se congregan en esta gran biblioteca que cuenta con diferentes actividades para todas edades; como lo es “FIL niños” que les ofrece a los más pequeños la oportunidad de acercarse al habito lector mediante un sinfín de actividades donde se les enseña inclusive a cuidar el planeta donde vivimos, con talleres tanto espontáneos como permanentes que nos abren la puerta a un mundo que no solo lee y es culto, si no, es a la vez consiente del planeta efímero en el que vivimos enseñándonos a chicos y grandes la importancia de cuidar nuestro medio para así lograr tener una sana convivencia, cuentan también con espectáculos escénicos como teatro de sombras donde pueden experimentar el placer de vivir una puesta en escena utilizando y desarrollando mayormente la imaginación, y no dejando de lado la creatividad se puede tomar un taller para crear personajes basándose en objetos de la vida real viendo que no solamente son simples cosas y que cada elemento con el que convivimos diariamente puede tener una historia que contarnos, finalmente nos damos cuenta que la Feria Internacional del Libro es mas que dedicarse a leer, es más que solo convivir con personas afines en gustos, es (muy en lo personal)una experiencia multicultural que nos fomenta una cultura de la inclusión y la diversidad.
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