Bienvenidos al mundo de MAL, un ensamble místico de tres agaves, donde la magia de la botánica se conjuga con la pasión, la excentricidad y el placer de degustar un mezcal único e inimitable.

House of MAL, se complace en presentar MAL MEZCAL, un viaje a una extraordinaria creación que extrae las  propiedades de una región única de nuestro hermoso país y las plasma en la experiencia de un mezcal blanco orgánico y artesanal 100% de agave.

Un secreto bien atesorado está por develarse; MAL MEZCAL nace a 4,921 pies sobre el nivel del mar, en una tierra muy rica en biodiversidad local: La Sierra Mixteca de Oaxaca. Es ahí donde donde comienza su creación, un verdadero paraíso geográfico que crea la pura esencia de MAL MEZCAL y que es lo que permite construir combinaciones verdaderamente únicas y emocionantes, lo que convierte a MAL MEZCAL en un elixir distinto en lo que respecta a aromas y sabores, haciéndola una fantástica joya botánica.  

MAL MEZCAL, es elaborado y curado cuidadosamente por maestros mezcaleros de 3ra generación, donde cada detalle del proceso cuenta. Inspirado y creado con un gran sabor pero a la vez suave y fácil de degustar, es el resultado de una gran mezcla y una doble destilación en alambique de cobre con 4 placas añadidas, lo que le da aún más suavidad al sabor.

En su alma, vive la combinación del maguey espadín (agave angustifolia), papalome (agave cupreata)  y el pulquero azul agave salmiana, lo que lo hacen tan especial, además, se pueden percibir aromas de romero, azahar, chile guindilla, café tostado y frutos críticos, entre otros; también están presentes en nariz, notas de clavo, chile serrano, naranja dulce y queso añejo.

 Nada está escrito en piedra, cada cosecha es diferente, cada botella tiene un toque único y un hermoso secreto bien guardado, una genialidad que se descubre en el producto final.

El tiempo es nuestro recurso más preciado, ya que se seleccionan meticulosamente solo agaves orgánicos maduros de entre 9 y 10 años,  estos se dejan reposar aproximadamente durante un año completo antes de la cosecha, para concentrar aún más sus preciosos azúcares. 

Otro de los procesos importantes dentro de su creación, es que se recortan todas las piñas a la perfección, para que no queden restos de hojas, ya que si quedan algunas, pueden dar un sabor amargo al mezcal.

En MAL MEZCAL, las  levaduras provienen del propio microbioma local, siendo este una expresión más del terruño local y el microclima específico de estos campos, aprovechando aún más la concentración de los azúcares. 

 Los maestros mezcaleros de House of MAL, trabajan meticulosamente cuidando cada detalle para garantizar la autenticidad del líquido, protegiendo y respetando una receta multigeneracional, de tradición milenaria, para garantizar que las esencias botánicas del agave no sean dominadas por el humo puro y pierdan su protagonismo, sino que permanezcan en el centro de la experiencia al beberlo. Esta frescura botánica distingue a MAL MEZCAL de todo lo que se ha ofrecido antes.

MAL MEZCAL te invita a dejar que tus sentidos te guíen en esta exquisita experiencia, inspirada en todos aquellos viajeros que buscan encontrar, apreciar y preservar joyas ocultas. MAL MEZCAL los seducirá y los sumergirá en un viaje de descubrimiento sublime, que despierta la curiosidad y eleva los sentidos, entregado de una manera suave e impecable.